martes, 26 de abril de 2011

Interrupción legal del embarazo. 4 años después.


El modus operandi asociado a las organizaciones criminales en el periodo comprendido entre el 2006 y 2011, arroja cifras que oscilan entre las 34 y 40 mil muertes. Prefiero intencionalmente no hablar de victimas, me reservo el termino para los inocentes, los cuales integran la estadística en un porcentaje muy pequeño, y esas sí las lamento.

El 26 de abril de 2007 fueron publicadas las reformas a los artículos 144 a 147 del Código Penal del Distrito Federal, mismas que contienen “la legalización o de la muerte del concebido no nacido, cuando así lo decide libremente la madre, durante las primeras doce semanas de gestación”, vulgarmente llamada Legalización del aborto.


El día de ayer, mi amigo Fernando Navarro Sanchez, (@fnavarrosanchez), me recomendó leer un artículo de Animalpolitico.com, titulado "A cuatro años de la legalizacion, más de 58 mil 152 abortos" firmado por Dalila Chagoya. 
El articulo plantea que a 4 años de que entrará en vigor la reforma, se han interrumpido más de 58 mil 152 embarazos, desde el 24 de abril de 2007 y hasta el 31 de enero, según el Instituto de las Mujeres del Distrito Federal”

No obstante lo anterior, derivado del análisis e indagación de los datos, puedo aclarar que las cifras que ofrece el Instituto de las Mujeres del Distrito Federal  (Inmujer.df.gob.mx) provienen, según se indica ahí mismo, de las estadísticas obtenidas en la ONG pro abortiva: "Grupo de Información en Reproducción Elegida, AC." (Gire.org.mx).

Precisado el punto anterior, es conveniente destacar que la cifra de “Interrupciones” Legales del Embarazo realizadas en el DF después de la reforma y hasta el 18 de abril de 2011, obtenida por la ONG de referencia y publicada por el Inmujer del Df, es de: 55, 715 interrupciones (nada menos). Es decir:
Muertes relativas al crimen organizado 2006-2011: 40,000.

Interrupciones Legales del Embarazo 2006-2011: 55, 715.

¿Algún comentario?


Joel Hernández Vázquez.
@joel_8h
Abril 26, 2010.


jueves, 7 de abril de 2011

Gambare nippon! Fuerza Japón!


Gambare nippon! がんばれ日
Fuerza Japón!
Siempre he tomado con mucha gracia cuando los mexicanos hacemos mofa de todo y todos, pensando que somos los únicos y que somos muy ingeniosos. Pero si alguien se atreve a hacer algún chiste de nosotros, nuestra escasa autoestima de identidad grupal se ve lastimada y brota en forma de protesta. La cólera desatada en el tortilla gate en el programa aquel de la televisión inglesa fue un ejemplo, cuando simultáneamente fluían sin freno chistes raciales sobre Kalimba.

Un blanco frecuente de nuestra “mordacidad” son los japoneses, hoy tristemente caídos en desgracia y quienes se levantaran con gloria del bache. Como siempre.

Japón es un imperio que data del siglo VII a. C,
México nació y se formo políticamente apenas en el siglo XIX pero por algún inexplicable motivo, existe quien piensa que son “curiosos” y penosamente los denominan chinos porque “todos son iguales” (ver Alicia Machado). Por favor… ¡existe más cultura japonesa en los mexicanos que mexicana en los japoneses!

Para muestra mil botones; Comer sushi es un deporte nacional sin el que no se explican las películas en casa. Nuestros taxis son Tsurus de Nissan y todos usamos relojes de cuarzo, inventados por Seiko. El reloj con calculadora de Casio fue un fenómeno social inolvidable. Existe un Nintendo en cada casa y las maquinitas arcade devoraron nuestros tokens. El karaoke nos cambio la vida de jueves a sábado y en la infancia todos fuimos al Karate. ¿Alguien ha tomado un tren en México? No tenemos. Allá se mueven en tren bala. Hello! Kitty, Keroppy, Pochacco, Pokemon, Sailor Moon, Los Super Campeones, Caballeros del Zodiaco y Dragon Ball: todos made in Japan.

El cúter esta en todos lados. El mítico disquete, cd´s, el dvd, y ahora el Blue ray forman parte del milagro diario de lo cotidiano.  El discman (furor de los 90) y las cámaras portátiles de video, sí, japoneses. Sony, Toshiba, Mitsubishi, Pioneer y JVC, adornan nuestros tv halls, mientras Mazda, Honda, Toyota y Suzuki nuestras cocheras.

Admiro a mis amigos japoneses que en 6 meses dominaron el español. Su gente se ha levantado de una guerra mundial perdida, 2 bombas atómicas y sismos idénticos o peores a los del ’85 en el Df. Las ciudades se reconstruyeron totalmente y brillan con luz propia. Tokio es alucinante y parece salido de una película futurista.

Hoy como ayer, Japón  renacerá y seguirá compartiéndole al mundo su luz; la del sol naciente.                      

 Joel H. Vázquez.